A partir de las declaraciones de Mauricio Macri "no hay nada más lindo que te digan qué lindos ojos, por más que esté acompañado de una grosería, como qué lindo culo que tenés", desde la Comisión de Géneros ATE-Mecon sentimos la necesidad de repudiar a través de este comunicado sus dichos, e invitamos a una reflexión seria de una problemática social compleja que sufrimos todos, especialmente las mujeres.
La palabra piropo connota una acción de galantería de una persona sobre otra dispuesta a escucharlo. Como comisión preferimos llamar a las cosas por su nombre: lo que sufrimos las mujeres es acoso callejero y aunque Macri no nos crea, nos molesta, nos ofende y nos incomoda.
Los “piropos callejeros” son palabras no deseadas llevadas adelante por desconocidos que están motivadas por el género e invaden el espacio físico y emocional de una persona de una manera irrespetuosa, sorprendente, atemorizante o insultante. Estamos tan acostumbradas a recibirlos que nos parecen naturales y hasta agradecemos los que no son tan ofensivos, sin embargo seguimos soportando la opinión de otros sobre nosotras. Por eso, nos parece importante no naturalizar que es una de las formas que toma la violencia sobre nuestros cuerpos.
El acoso callejero es una expresión en la cual no se considera a la mujer como interlocutora valida: lo único que cuenta es la expresión de deseo de una persona sobre el cuerpo de otra que no se lo pidió. Si no se reconoce a la otra persona como sujeto activo, se la transforma en un objeto: se la cosifica. Es parte del abuso de poder que sufrimos las mujeres en la calle.
Nosotras como mujeres que integramos la comisión de géneros le decimos NO a la violencia callejera, en cualquiera de sus formas.
Hay personas que consideran que el piropo es positivo para la autoestima de las mujeres: y aunque Macri diga “a aquellas que dicen que ofende, no les creo nada”, nosotras decimos:
NO QUEREMOS TU PIROPO, QUEREMOS TU RESPETO.
La autoestima no depende de lo que digan los demás. Nos parece relevante este debate porque implica situaciones que no sólo ocurre en las calles, sino que se reproducen en nuestros espacios de trabajo, donde creemos que es importante generar responsabilidad colectiva, para ayudar a construir una sociedad con relaciones y vínculos de igualdad.
Comisión de Géneros ATE-MECON
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