LA PLANTA PERMANENTE ES UN DERECHO
Desde la Junta Interna de ATE Ministerio de Economía expresamos nuestro más
profundo rechazo a la medida cautelar presentada por el candidato a presidente
por la Libertad Avanza, Javier Milei, para frenar las “designaciones en el
estado”, que no son otra cosa que el proceso de regularización del personal contratado,
a través de los concursos.
Este eufemismo falaz y mal intencionado de “designaciones” intenta sembrar
confusión en la opinión pública acerca del verdadero carácter del proceso de
concursos iniciado recientemente. Mediante ese proceso, trabajadores/as de 5 o
más años en la administración pública, que vienen siendo empleados mediante
contratos fraudulentos, renovados cada año y plausibles de cancelación con la
sola decisión del estado empleador, sin derecho a indemnización, pueden tener
la posibilidad de acceder a la planta permanente. La estabilidad está consagrada
en la Constitución Nacional y en el propio Convenio Colectivo de Trabajo, que
establece que el personal no permanente “será afectado exclusivamente a la prestación de servicios de
carácter transitorio o estacional”. Este tipo de contrataciones transitorias enmascara
el auténtico vínculo laboral, puesto que la totalidad de las y los trabajadores
a los cuales va dirigido el referido proceso concursal se encuentran
desarrollando tareas permanentes y en muchos casos con varios años de desempeño
en un mismo puesto o dependencia.
Rechazamos, asimismo, las
expresiones de Patricia Bullrich y varios referentes de Juntos por el Cambio
que, en sintonía con la postura de Milei, intentan tergiversar el proceso de
pase a planta permanente, queriéndolo mostrar ante la sociedad como una movida
política del gobierno para “meter a su gente” o como expresión de clientelismo
político.
Lo que ocultan desde uno y
otro espacio político es que están jugando con la estabilidad laboral de
trabajadores que, en algunos casos, llevan 10, 20 o 30 años de trabajo en la
administración pública, muchxs de ellos profesionales, que perciben salarios
que lindan con la línea de la pobreza en las categorías promedio, supeditados
en ocasiones a realizar horas extras para poder llegar a fin de mes. Es
justamente el acceso a la planta permanente lo que garantizaría la eliminación
de cualquier clientelismo, o sujeción a la voluntad política del gobierno de
turno, otorgando plenos derechos a lxs trabajadorxs.
Cabe destacar, asimismo,
que los concursos, lejos de ser designaciones “a dedo”, implican un proceso
complejo, en donde la inscripción, evaluación de postulantes y selección puede
llevar varios meses, e incluso puede quedar vacante. Quienes se postulan deben
cumplir requisitos, aprobar evaluaciones, y acreditar capacitaciones,
dependiendo del nivel escalafonario al cual se postule.
Por último, desde nuestra representación gremial venimos
señalando hace tiempo la responsabilidad del actual gobierno en la demora y las
falencias en el propio proceso de concursos que llevaron a iniciarse en medio
de las elecciones, cuando hace tres años se había acordado dicho proceso de
regularización en paritarias. Esta demora innecesaria no hace más que dejar a
lxs trabajadores que día a día sostenemos el funcionamiento del estado como
rehenes de las intencionalidades políticas de estos personajes, así como de las
fakes news de algunos medios masivos de comunicación.
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